Quería recordar que cuando me tocó entrar a gobernar la Argentina había una filosofía de tratamiento para la resolución de los problemas que la podríamos sintetizar de la siguiente manera: un buen gobernante era aquel que era fuerte con los débiles y débil con los poderosos. Desde el primer día me impuse cambiar esa cultura.” Néstor Kirchner, 3 de agosto de 2005
La problemática del acceso a la tierra para la vivienda y la producción no se resuelve a los palos.
Aquellos que queremos una patria justa, libre y soberana, seguimos sosteniendo que la propiedad debe estar en función social, no para la especulación.
Sabemos que la historia no empieza (ni termina) en Guernica. Las tomas de tierras han sido un legítimo camino que viene transitando nuestro pueblo para que el derecho constitucional a la vivienda se concrete.
Hace un año votamos dando un contundente rechazo al modelo neoliberal. Votamos por un gobierno que tome en cuenta las necesidades que existen y garantice los derechos populares. Y este gobierno cuenta para ello con el apoyo demostrado en las urnas y en las calles, a pesar de la pandemia, para avanzar en romper el condicionamiento que pretende imponer el poder real, para empezar a construir una Argentina con TECHO, PRODUCCIÓN Y TRABAJO.
